El verano invita a salir de casa. A disfrutar al aire libre, del sol, del mar, la montaña… ¡Y qué bien nos sienta! No es solo por estar de vacaciones y dejar de lado el trabajo, la evidencia científica nos confirma que cuando pasamos tiempo inmersos en entornos ricos en naturaleza nuestro cuerpo genera sensaciones de serenidad, descanso y seguridad, aumentando la dopamina en el cerebro y incluso llegando a mejorar nuestro sistema inmune.
Con la llegada del otoño vamos volviendo a nuestras rutinas de trabajo, se acortan los días y pasamos más horas en casa. Para estos meses, te proponemos un reto: encontrar el equilibrio entre nuestra forma de vivir contemporánea, urbanita y de agendas llenas, con nuestros instintos y necesidades más básicas como seres que formamos parte de la naturaleza. Abre las puertas de tu hogar y deja que se cuele la naturaleza.
Puedes disfrutar del exterior en tu casa en cualquier época del año teniendo en cuenta pequeños detalles como apostar por materiales y colores naturales. Piedra, madera, tejidos orgánicos, como unas acogedoras sábanas de algodón, son texturas que en cualquier parte o complemento nos acercan a la naturaleza. También puedes aprovechar tus salidas para recoger algunas piñas, flores o piedras bonitas con las que decorar algún rincón. Elige colores neutros y naturales, junto alguna pincelada de verde.
Recuerda que por muy urbanita que seas, rodearte de plantas no solo te ayuda a decorar y embellecer tu casa, sino que también te ayuda a refrescar el ambiente, purificar el aire, absorber los malos olores, neutralizar la electricidad, reducir la humedad… con todo lo que ello aporta a tu salud y estado de ánimo. Grandes, pequeñas, colgantes, trepadoras o jarrones con flores, hay especies para cada rincón de la casa.
La cocina también nos conecta con la naturaleza. Elegir las frutas y verduras de temporada y de la zona, llenan nuestra mesa de olores y sabores que nos acercan a la tierra, y que alimentan cuerpo y alma.
Y para cerrar tu día, deja que la naturaleza te envuelva. Regálate un tiempo para ti, para mimarte. Para tus cuidados de higiene y belleza diarios elige cosméticos naturales que aporten a tu piel todo su poder y propiedades.
En definitiva, para transformar tu hogar en un oasis, presta atención a cada textura, color aroma, sabor… y la sensación general que transmite cada elemento que entra en tu espacio, y podrás disfrutar de la naturaleza dentro de casa todo el año.